Es un invento que quizás pocos conozcan, pero los frioleros o friolentos lo agradecerán muchísimo. A una gran cantidad de personas nos pasa que si tenemos frío en los pies, ¡hala!, tendremos frío en todo el cuerpo. Y es que cuando comenzamos a sentir frío, nuestro cuerpo busca calentar los más importante: órganos internos y nuestro cerebro. Por esto, nuestras extremidades pagan. Las personas más delgadas o con menos ácidos grasos son quienes más frío sienten. Si entras en el grupo de los pies como cubos de hielo, este artículo es para ti. Como muchos males, éste tiene solución y aquí te daremos varias opciones:
- La principal, por la que optamos siempre, es abrigarnos muy bien los pies. Sea con calcetines largos y mullidos o con una manta completa tapándolos.
- Algo que también funciona, al menos por un tiempito, es bañar los pies en agua caliente. Los puedes tener un rato sumergidos.
- Puedes darte masajes, aunque si no puedes disponer de las manos al momento es un problema.
- Existen cremas caloríficas con canela, clavo, jengibre, etc.
- Y la más rápida y duradera que recomendamos aquí, es usar un calientapies. Porque te proporcionan una temperatura constante, son suaves y cómodos, sirven para cualquier talla de adulto, son fáciles de usar y consumen muy poco.
Así, puedes estar tranquilamente en el sofá viendo tele, estudiando o con el portátil, mientras tus pies están calentitos. ¡Incluso hay quienes se lo llevan a la oficina! Para las personas mayores también son una muy buena alternativa. Y son perfectos para usar en los días lluviosos, cuando llegas a casa con los pies húmedos, evitando así también posibles resfriados. En Miniprice tenemos muy buenos modelos que van desde los 39,97€ hasta los 45,32€. ¿Qué esperas para estar este invierno más cómodo que nunca?