Un ordenador portátil es uno de los bienes más preciados por jóvenes y no tan jóvenes. Si estás pensando en regalarle a alguien su primer ordenador personal o sencillamente para que renueve su viejo dispositivo, debes saber que escoger el más adecuado es una tarea complicada. Toma nota de los consejos, recomendaciones o aspectos a tener en cuenta a la hora de elegir el portátil en función de las necesidades del usuario.
Por norma general, lo que diferencia principalmente a un ordenador de otro son sus componentes: procesador, memoria RAM, capacidad de almacenamiento y tarjeta gráfica. Otras características a tener en cuenta son las de la pantalla, la batería y las opciones de conectividad.
Si es para un estudiante…
Los estudiantes utilizan a diario el ordenador portátil para buscar información, tomar apuntes, realizar trabajos, etc. Por tanto, lo más importante para ellos es el peso y la duración de la batería. Lo más habitual es que con una autonomía de ocho horas vayan más que servidos. Si quieres saber la duración real de la batería, busca opiniones de otros usuarios y no te fíes solo de la información del fabricante.
En cuanto al peso, los ultrabooks son los dispositivos más ligeros. El inconveniente es que esta característica los convierte en productos de un precio más elevado. El tamaño de la pantalla afectará también al peso, por este motivo, si el agasajado no estudia diseño gráfico, arquitectura o audiovisuales, con 13 pulgadas es suficiente. Para estos estudiantes, les hará buena falta un portátil con pantalla de 15 pulgadas y resolución 4K, además de 8GB de RAM y procesador i5 como mínimo. Esto último también se aplica a los estudiantes de ingeniería, ya que la potencia es clave a la hora de ejecutar con soltura los diversos procesos.
Respecto a la capacidad de almacenamiento interno, debemos tener en cuenta que se puede conectar una memoria externa portátil para guardar los archivos por lo que no es necesario invertir en un pc de 1TB de almacenamiento. Y en cuanto al tipo de memoria, la SSD es esencial para los que necesiten ordenadores potentes y rápidos. Si solo lo va a usar para navegar y guardar documentos, puede ahorrar con una memoria HDD.
Si es para un profesional…
Cuando el ordenador se convierte en la herramienta principal de una persona en su trabajo, la velocidad es esencial para no perder tiempo y realizar varias tareas a la vez. Para evitar problemas es necesario contar con un procesador i7 con memoria DDR4, 1 TB de capacidad de almacenamiento y un disco SSD para que el equipo arranque y trabaje a gran velocidad. Además, si el oficio está relacionado con la fotografía o video, es necesario contar con una tarjeta gráfica dedicada.
Si se trata de un gamer…
En este caso, toda la potencia es poca. Como mínimo necesitarás un procesador i5 de última generación o un Ryzen 7, y 8GB de RAM DDR4. Se necesita una gran memoria para que no se bloqueen las aplicaciones o se ralenticen los pasos y una buena tarjeta gráfica. Las de la marca Nvidia garantiza buenas opciones dentro de una gran variedad de precios, aunque debemos destacar las GTX de la familia 1000. Además, la unidad de almacenamiento debe ser una SSD para que trabaje con rapidez. ¿Un detalle que nos olvidamos y en este caso es muy importante? El sistema de refrigeración. Este debe ser eficiente, dado que el equipo pasará una cantidad ingente de horas funcionando.
Finalmente, los gamers tienen fijación por las pantallas grandes de gran calidad. Por este motivo te aconsejamos optar por paneles TN ya que ofrecen una mayor calidad de imagen pero menor tasa de refresco.
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